Microsoft ha sido un inversor clave en un programa de las Naciones Unidas que permite a los países desarrollados invertir en proyectos ecológicos en el extranjero, comerciando con la contaminación doméstica. Se espera que el programa denominado Créditos Certificados de Reducción de Emisiones de la ONU crezca a 50 millones de créditos de carbono para 2020.
Uno de los asesores del proyecto, Daniel Rossetto, Director Gerente de Climate Mundial, informa que es probable que aumente el crecimiento de la demanda de créditos de carbono. Observó que las empresas ahora están optimistas pero comprando créditos según lo rastreado en el ICE Futures Europe Exchange, en Londres en 2014.
Anteriormente, la demanda de créditos de Reducción de Emisiones Certificada de la ONU había caído hasta el 98%, desde 2008. Esto se debió al fracaso de muchas naciones en adoptar dicha opción comercial. Según las últimas actualizaciones, no se espera que el mercado de carbono más grande, que es Europa, use CER después de 2020. La probabilidad de su uso será posible solo si los objetivos actuales de emisiones globales se presurizan aún más.
A medida que la demanda comercial para el desarrollo sostenible y la protección del clima se convierte en el mantra, la demanda de CER ha aumentado, comentó Rossetto en una entrevista.